Dentro de la región nórdica Finlandia es el tercer país con el mayor número de habitantes tras Suecia y Dinamarca. Cuenta con una población de algo más de 5 millones y medio de personas, la gran mayoría concentradas en la zona metropolitana de Helsinki, su capital, y otras dos ciudades cercanas que son Espoo y Vantaa. Finlandia pertenece a la Unión Europea desde el año 1995 y goza de las ventajas comerciales correspondientes con los países miembros. El Convenio de Doble Imposición con España, firmado inicialmente en 1967, fue revisado en 1991 y nuevamente en 2015.
La economía finlandesa muestra una distribución por sectores económicos propia de una economía desarrollada, es la economía número 44 del mundo por volumen de PIB.
La agricultura está muy subvencionada por el Estado, ya que las dificultades asociadas a su clima hacen de ella una actividad difícil. Los bosques son su recurso natural más importante: cubren el 86% del país. Una cuarta parte es explotada por el Estado, con 2,7 millones de hectáreas protegidas. De hecho, el sector industrial está directamente relacionado con la explotación forestal, desde la industria de la madera hasta el sector químico. Hoy sigue suponiendo un 20% del total de sus exportaciones.
Por su parte, la industria alimentaria del país es deficitaria: Finlandia se ve obligada a importar grandes volúmenes de frutas, verduras o café, lo que a su vez constituye una oportunidad destacada para los exportadores andaluces del sector agroalimentario. Otro sector que ofrece oportunidades para las empresas andaluzas es el de las energías renovables.